El libro recorre cuatro décadas, de 1976 en el inicio de la redemocratización de Brasil a 2016 comienzo de las políticas conservadoras y antidemocráticas presididas por el golpe de estado parlamentario que destituye a la presidenta Dilma Rousself. Del origen del proceso reformador se detalla la formación a mediados de los años 70, en el marco de la lucha contra la dictadura militar, del movimiento de reforma sanitaria y psiquiátrica, la creación de organizaciones ( CEBES, MTSM) por núcleos de jóvenes activistas en cuyo ideario estaban presente la critica a la psiquiatría tradicional y las experiencias de cambio que se habían venido produciendo en otros países, en especial en la Italia triestina; pero también, y es una de sus características diferenciales, la influencia del salubrismo brasileño, la Salud Colectiva, que surge en los años setenta frente a la línea preventivista hegemónica y que va a fundamentar el futuro Sistema Único de Salud (SUS). Política salubrista que considera la determinación social como factor que subsume el resto de determinantes de salud (biología, estilo de vida, medioambiental, capital social y cultural, sistema de sanitario) y el derecho a salud como compromiso ineludible del Estado, frente a la responsabilidad individual de la enfermedad y el sufrimiento psíquico.
De ahí el leitmotiv el libro: la reforma psiquiátrica no es solo el cierre del hospital psiquiátrico y una simple reordenación de servicios en el territorio, sino que es un proceso social complejo donde no se trata solo de tratar de una forma más humana y más eficiente técnicamente a las personas con diagnóstico de trastorno mental.