La primera edición de Tusquets es de 1983, y desde entonces este libro es una referencia sobre la medicina mental y el orden social en la España del siglo XIX, como reza su subtitulo. Su interés, señala J.M. Comelles en Arxiu d'Etnografia de Catalunya, 1984) “desborda con mucho los límites de la historia de las ideas psiquiátricas en nuestro país para insertarse en una perspectiva más amplia de la que participan la sociología histórica, la antropología histórica, la historia de la Ciencia y la Historia general. Referente obligado para conocer la gestión no solo de la locura, sino de la pobreza, de las instituciones de exclusión, la tutela y las normativas legales; su redefinición, en definitiva, en la España del siglo XIX. Una redefinición, que como señalan Huertas, Campos y Álvarez (Historia contemporánea, 1997), lejos de crear un orden psiquiátrico de tutela y cuidado, fueron intervenciones destinadas a la defensa del orden social.
Aquí puedes leer el prólogo de Robert Castel
La ambición de este libro no es solo formular una critica de la psiquiatría contemporánea, sino señalar las posibles formas de salir del callejón en la que está atrapada. Para el autor lidiar con el trastorno mental significa romper el patrón de la salud/enfermedad y de la hegemonía del modelo biomédico y enfrentarse al sufrimiento. Por lo tanto, es necesario volver a empezar desde la escucha y desde la clínica individual hasta encontrar las contradicciones y desafíos de la comunidad política.
Tamasin Knight parte de que las creencias inusuales (o delirios, ideas obsesivas y pensamientos intrusivos, en un lenguaje más clínico) no son un problema en sí, sino que podrán serlo o no según se traten, se aborden y desde dónde se vivan. En su libro (que puede ser utilizado tanto por las personas que experimentan estas vivencias con sufrimiento o malestar en su día a día, como por su entorno y profesionales que deseen practicar otras formas de acompañamiento) ofrece numerosas claves e ideas prácticas y concretas para afrontar esas experiencias.
El enfoque de proporcionar ayuda para afrontar y convivir con las creencias inusuales en vez de empeñarse en su eliminación, que además suele generar desconfianzas, no solo parte de la realidad práctica de estar ya mejorando las perspectivas vitales de muchas personas que han pasado a vivir una vida que sienten más valiosa y menos difícil, también implica un posicionamiento ético y político que no solo respeta, sino que también valora la diferencia y la diversidad en la sociedad, el derecho a ser, pensar, sentir, hacer? distinto.
Este libro es una invitación a viajar en compañía de grandes novelistas y sociólogos por la Sicilia de Garibaldi, por la Rusia de los zares, por el Londres victoriano, la Viena de Freud, la España de la Guerra Civil... A lo largo de los distintos capítulos se abordan problemas sociales tales como la cuestión nacional, la formación de una ética laica y solidaria, las resistencias contra la precarización del trabajo asalariado, el vínculo entre feminismo y la lucha contra la violencia…
Locuras en primera persona. Subjetividades, experiencias, activismos. Rafael Huertas. Madrid, ed Catarata, 2020.
Con la propuesta de construir una historia de la locura “desde abajo”, y con un marco teórico próximo a los Mad Studies, este libro da cuenta de experiencias, subjetividades, formas de expresión y aspiraciones, vividas y narradas en “primera persona” por personas psiquiatrizadas, institucionalizadas o con malestar psíquico. Se recurre para ello al análisis de cartas, obras literarias, diarios, fanzines, etc., intentando valorar los testimonios e interpretaciones sobre la locura propia en contextos diferentes. Pensar la locura a través de las expresiones escritas de los locos y las locas nos llevará a transitar desde las letras cautivas (de internas anónimas) en la institución total del manicomio —que nos ilustrarán sobre las condiciones de vida en su interior y sobre complejos procesos de negociación y resistencia—, hasta otros escritos que ponen de manifiesto el esfuerzo subjetivo de sus autores (Schreber, Joyce, Pessoa, etc). Por último, se presta especial atención a la doble condición subalterna de la locura femenina mediante algunas manifestaciones artísticas y literarias de mujeres diagnosticadas, algunas de las cuales se convirtieron en referentes feministas indiscutibles (Sylvia Plath, Leonora Carrington), además de en pioneras (Kate Millett, Judi Chamberlin) del activismo “loco” o “en primera persona”.
Aquí puedes leer el prólogo